"No fumo desde hace 1 mes, 1 semana y 12 horas. En este tiempo he dejado de fumar 1.001,61 cigarrillos y me he ahorrado 125,20 Euros"
Lo tenía que poner. Se me ha olvidado poner los 1000 cigarrillos justos porque estaba escribiendo la entrada anterior.
- Lucky Strike, búscate otro cliente para los 5 cartones de tabaco que no me he fumado!!! que yo me buscaré donde gastarme los 125 euros que me he ahorrado...
¡Una nueva grieta se abre en mi férrea voluntad de abandonar el tabaco!
Ayer estuve comiendo con unos antiguos compañeros de la carrera en las afueras de la ciudad. Todo controlado menos un café que tomamos después de comer y unos minutos que estuvimos en un atasco en la carretera.
Descubrí que ayer cuando realmente lo pase peor fue cuando no tenía que hacer nada, cuando tenía que esperar y dicha espera era impuesta. La idea del cigarrillo como elemento para esperar y matar el tiempo aún está a pleno rendimiento en mi mente. Y es uno de los mayores peligros a los que me enfrento actualmente en mi guerra contra el tabaco.
Por lo menos me da tiempo a conocer mis debilidades y a ser consciente de que en esos momentos estoy siendo víctima de un ataque y que por lo tanto lo que tengo que hacer es "ponerme en modo de espera" y esperar que las ganas de fumar desaparezcan. Y la espera no es agradable pero es llevadera, no es una excusa para fumar.
La próxima semana me voy de vacaciones, así que esa es la próxima etapa en mi proceso de dejar de fumar, ese es mi próximo reto.
Saludos a todos, y en especial a los que os mantenéis en la lucha contra el tabaco. Es una guerra que hay que ganar. Es una guerra que vamos a ganar. PODEMOS. ;-)
Voy a empezar una serie de post semanales de estilo periodístico en los que voy a ir aglutinando experiencias relacionadas con mis primeros 12 meses sin fumar. Actualmente, tengo ya en el bolsillo 5 semanas sin fumar, todo un récord sin fumar, hasta que llegue a los 18 años sin fumar (pues empecé a fumar con 17 años) que será un récord de inhalar aire "limpio".
Ante la incertidumbre y la ansiedad que generan las expresiones que los políticos se inventan tanto para fomentar la Igualdad como la Economía, siempre nos quedará la Real Academia de la Lengua. Dicha Academía define la ansiedad como un estado de agitación, inquietud o zozobra del ánimo.
Uno de los síntomas del síndrome de abstinencia que se sufre al dejar de fumar es la ansiedad. En mi caso, la ansiedad generada por la ausencia de nicotina y el subidón del oxígeno en mis tejidos era el muro de la vergüenza en todas las recaídas que he tenido en intentos anteriores. Era el muro que separaba una vida atada al paquete de tabaco de una vida mucho más saludable.
En este intento he sido más consciente de que debía soportar las molestias de pasar de una sangre en la que predominaba el monóxido de carbono a una sangre mucho más oxigenada y unos vasos capilares más abiertos (si no es que estaban cerrados). Esta sustitución del monóxido de carbono por el oxígeno es lo que, a mi juicio, viene a ser LA AGITACIÓN que caracteriza a esta ansiedad. Y sabes de siempre que un cigarrillo te calma la agitación provocada por la necesidad de nicotina desde siempre. (primera tentación).
Toda esta agitación interior que se sufre porque el organismo está volviendo a los parámetros normales nos genera INQUIETUD por las molestias y por conocer cuando se van a terminar o sí se van a terminar. Entonces, el cigarrillo parece que va a terminar con dicha inquietud. (segunda tentación)
Zozobra. Zozobra es el hecho de zozobrar. Estar inquieto o desazonado por la inseguridad respecto de algo o por la incertidumbre sobre lo que conviene hacer. Es decir, recaída. Si no tienes información sobre cómo afecta a las personas el proceso de dejar de fumar, estás inquieto porque tienes molestias físicas, sabes cómo has estado calmando esas molestias físicas durante años, tienes incertidumbre sobre lo que conviene hacer y sobre los futuros episodios que te esperan, no tienes otra salida que la recaída. Esto era lo que me pasaba a mi. Zozobraba por la agitación y la inquietud. Era una ansiedad triple, un muro infranqueable.
Pero para ansiedad y zozobra la que he experimentado hoy y sin ganas de fumar. Me he levantado más pronto que un día normal. He desayunado y me he preparado para salir a la calle más rápido que cuando tengo que ir a trabajar. En mi caso por lo menos eso demuestra ansiedad. Ansiedad por ver a dos coches de formula 1 hacer el recorrido del encierro.
¡El espectáculo comenzaba a las 7:45! Y este ha sido el espectáculo:
Un Hummer con un altavoz y un dj que parecía el amigo del portero de la Plaza de Toros. Eso sí, la música era buena. Pero es que a esas horas de la madrugada cualquier música que te despierte un poco más parece buena.
El animador se lo ha tenido que currar porque el ambiente entre el público era más frío que los "¡80 kgr de hielo que van a usar para refrigerar los motores!". Ha intentado arrancar con el "uno de enero, dos de..." pero no le ha seguido ni una sola voz de un tendido prácticamente lleno.
Los silbidos de desaprobación han comenzado poco después de las 8:02 de la mañana. LA AGITACIÓN. Durante el camino a la plaza hemos podido ver la causa probable de dicho retraso (salvo que haya sido un problema de conexión vía satélite para entrar en directo en algún medio de comunicación) ha sido la escasa previsión en el montaje. A las 7:30 aún faltaba de montar una de las torres donde iban las cámaras de televisión en la curva de Telefónica.
A las 8:15 ha estallado el cohete y han salido los coches. Iban los pastores detrás de los coches. El encierro ha sido soso, sin el más mínimo resquicio de riesgo, lento, ni un corredor se ha puesto delante de un coche, deslucido, ... LA INQUIETUD solo ha existido ante la pregunta del ¿qué harían cuando entraran los monoplazas en la plaza? Dicha inquietud me ha hecho coger mi teléfono móvil cuando los coches estaban a punto de entrar en la plaza y para cuando he podido ponerlo en modo de grabación de vídeo he podido grabar esto:
ZOZOBRA. ¿Y la publicidad de Reyno de Navarra? No se ha visto nada bien en las imágenes que se han echado del "encierro". ZOZOBRA.
Ansiedad también al llegar a casa. Ansiedad por pasar la foto y el vídeo al portátil y al blog. Ansiedad por comenzar esta serie de crónicas de exfumador. Ansiedad porque funcionara bien el portátil. Y es que no atino a configurar bien el wifi. Tanta ansiedad que no es que haya tenido ganas de fumar, he tenido ganas de cogerlo y tirarlo contra la pared.
La moraleja: La persona que está dejando de fumar y lleva ya unos cuantos días tiene que ser consciente de que YA NO ES EL TABACO NI EL NO FUMAR el que se lo hace pasar mal. Es que la vida en si puede alterar su estado de ánimo a estados altamente ansiosos.
- Y es que -dijo 'el organizador'- en las maternidades debería haber un cartel en el que pusiera: "Vivir puede ser perjudicial para su salud".
- ¡Anda, bruto! -dijo 'el del pueblo'- ¡si los recién nacidos no saben leer!
"No fumo desde hace 1 mes, 2 días y 22 horas. En este tiempo he dejado de fumar 882,45 cigarrillos y me he ahorrado 110,31 Euros".
Esto es lo que pega el quitómetro automáticamente en cualquier sitio donde pulse Ctrl+J. Pero lo que no dice automáticamente es la nicotina y el alquitrán que has dejado de ingerir. Ahora mismo, en mi caso, son:
- 5,29 grs nicotina - 52,95 grs alquitrán
Según "SanGoogle" la dosis mortal de nicotina para humanos (y humanas) se sitúa entre 40 y 60 mg. Por lo tanto, si me tomará toda la nicotina que he dejado de tomarme en estas casi 5 semanas podría morirme 105 veces lo cual es imposible. Sobre todo si tenemos en cuenta que tendría que resucitar 104.
Sobre el alquitrán no he encontrado dosis mortal, pero sí que está compuesto por multitud de sustancias cancerígenas y de que es el culpable de que los pulmones al final de toda una vida queden tan lucidos como un tramo de autovía a inagurar.
Referente a una de las etiquetas del blog, "capital biológico", quiero compartir con vosotros lo que considero una excelente interrelación entre las diferentes facetas del ser humano. Se trata del: Modelo de los cinco capitales de Mario López de Ávila.
Y es que esta vida consiste en mantener el equilibrio que busque cada uno entre estos 5 capitales.
Así que tomaré prestados para mis etiquetas sus conceptos de 5 capitales, como esqueleto en el que ir apoyando diferentes iniciativas sobre las que reportaré aquí.
Por ahora solo me estoy centrando en mejorar mi capital biológico, así que por ahora solo tendré ese capital entre mis etiquetas.
Y es que cumplido el primer mes sin fumar, estoy menos seguro que nunca de haberlo dejado cn todas las de la ley. He dimitido del trabajo. No sé cuándo me iré. Estoy pensando en comenzar a correr siguiendo los consejos de Zen Habits y apuntarme a unas oposiciones de nivel B. ¿Mucho cambio en mi vida para continuar sin fumar?... ya se verá.
Ahora que he dejado de fumar, pienso que tengo que utilizar más mis pulmones para ir acelarando la recuperación.
Si antes fumaba y no hacía nada de ejercicio ahora, que sin fumar y con mi capacidad física recuperada en parte, tengo que aprovechar y hacer algo de ejercicio. Además como me canso menos, es más agradable y parece más sencillo.
¿Quién me iba a decir a mi que iba a ser capaz de hacer 10 kilometros en bici en alrededor de una hora hace mes y medio? No me lo hubiera creído incluso me hubiera reido. ¡Iluso de mi! Sin embargo, acabo de venir de hacerlo, con el frescor de la mañana, viendo como se "despertaba la ciudad", me he dado la vuelta a la meseta sobre la que está asentada gran parte del centro de la ciudad. Las cuestas las dejamos para los meses venideros...
Por si alguien quiere saber la ruta aquí la tiene:
En la parte oscura de la crónica está la cena de ayer con los amigos. Calorcito, terracita, plato combinado, charla entretenida... ... y casi todos fumando. ¡Hasta tres y cuatro veces me llego a llamar el subconsciente:
- ¡Lucas! Mira es paquete de Winston! ¿No quieres uno para disfrutar más de esta bonita cena en una terracita?
- ¡Lucas, fúmate un cigarrillo, que ya se ha acabado la semana y esta ha sido especialmente intensa, para disfrutar más del refresco!
Y yo:
- ¡Vete a la mierda, subconsciente!
- Con lo que me ha costado dejar de fumar voy a aguantar esta pequeña tentación, porque si caigo tendré que volver a recorrer otra vez TODO el camino y no sé cuando reuniré las fuerzas necesarias para volver a hacerlo.
- Puedo pasar sin fumar, aunque CREA que va a ser un poco menos agradable.
- El placer extra que me va a dar el fumarme el cigarrillo no es apenas placer. (Más bien las pocas veces que he recaído, el primer cigarrillo siempre me ha provocado tos, mareos y dolor de estómago y eso que había estado en abstinencia mucho menos tiempo que el que llevo a ahora). Además no compensa con el hecho de que tendría que dejar de fumar otra vez.
Así que ahora ando luchando contra el "lavado de cerebro" que tan bien explica Allen Carr en su libro. Capítulo que tal vez me relea este fin de semana. Más que nada para refrescar conceptos. Total es un libro de fácil lectura.
"No fumo desde hace 4 semanas, 1 día y 12 minutos. En este tiempo he dejado de fumar 754,22 cigarrillos y me he ahorrado 94,28 Euros"
Durante este proceso hay varias canciones que he estado escuchando de manera casi tan compulsiva como la manera en la que fumaba últimamente:
Chambao - Duende del sur, que casi se ha convertido en la banda sonora oficial de mi abstinencia. Es una musica muy relajante, ha sido como un mantra.
Cuando estaba bastante mareado, sin capacidad de concentración, también la canción del blog "Volando Voy" ha tenido sus méritos en hacerlo más llevadero.
Duffy - Mercy, esta canción está más asociada a los días en los días en los que los síntomas físicos de la abstinencia iban remitiendo y la alegría por ver como el quitómetro iba sumando horas de aire y no de humo.
Como resumen, un par de canciones tranquilitas para "adormecer" al mono y otras dos un poco más alegres para celebrar que vamos añadiendo días y salud a nuestras vidas. A mi me han ayudado algo, tampoco digo que sean una ayuda imprescindible, pero seguramente que refuercen los estados de ánimo por los que se pasan a dejar el tabaco.
Como he comentado en otros post, dejar el tabaco tiene que ser como una guerra: cualquier táctica vale para derrotar al odioso enemigo. Todo esfuerzo es necesario para lograrlo. Por lo menos eso me parece a mi, que estoy dejando de fumar después de más de 8 años deseando dejarlo.
...se vuelven más viejos, más débiles. Con el tiempo mi primera línea de defensa contra el tabaco va desapareciendo y los ataques del mono psicológico consiguen hacer incursiones cada vez más profundas contra mi voluntad. Pero todavía no la han derrotado. Esto es lo que me está pasando entre ayer a la tarde y hoy.
En la guerra que estoy manteniendo contra mi adicción al tabaco, la última batalla librada bien podría llamarse "la batalla de después de comer".
Aunque realmente no tenga la ansiedad/necesidad física de fumarme un cigarrillo y los ataques apenas duren segundos, cuando me levanto de la mesa despues de haber comido-cenado-o-desayunado, me salta el automático "y ahora un cigarrito". Y durante esos dos segundos me veo a mi mismo fumando si tuviera el cigarrillo en la boca y el mechero en la mano. En esa situación no me lo podría impedir. Menos mal que no ocurre. Me da miedo que se dé esa combinación de factores.
Así que aunque la dificultad de concentración ha desaparecido (incluso creo que ha mejorado mi capacidad para concentrarme), la capacidad respiratoria ha mejorado y con ella la capacidad de esfuerzo físico, las ganas físicas de fumar no existen y muchos de mis amigos no fumadores me dicen que ya lo tengo superado, no las tengo aún todas conmigo. Estoy alerta, creo que me voy a jugar una mala pasada a mi mismo.
"No fumo desde hace 3 semanas, 4 días y 23 horas. En este tiempo he dejado de fumar 675,03 cigarrillos y me he ahorrado 84,38 Euros"
Este video es en plan positivo. Muy bueno como refuerzo en las decisiones para dejar de fumar los primeros días.
En este se pueden ver también cosas curiosas, pero lo que más me ha llamado la atención ha sido ver los cigarrillos y que me sean indiferentes.
Solamente decir: - que sigo en la brecha. - Que no me creo que lleve 25 días sin fumar. - Que con el regaliz, ya no tengo ganas de fumar. - Que si paso mucho tiempo con mis amigos fumadores si que tengo mayores tentaciones pero que las puedo superar. - Que estoy orgulloso de estar en el camino de no fumar nunca más. - Que estoy orgulloso de poder pasar hora y media en un centro comercial o un teatro y no preocuparme de terminar rápido para salir a fumar. - que ojalá que esta abstinencia dure para siempre. - que estoy muy mosqueado porque la gente que deja de fumar dice que dejarlo fue lo más difícil que hicieron en su vida (y a mi no me parece que me esté costando tanto).
Al hilo de este ultimo punto, esa falta de esfuerzo que aprecio y que atribuyo a la magnífica acción que tuvo el bupropión en mi, es la que me hace temer que cuando un recuerdo de lo que fue fumar me pille un poco desprevenido, no tenga en mente el "gran esfuerzo" que me costó llegar a donde estoy, y recaiga de la forma más tonta y sin prestar resistencia.
Así pues, nunca debo dejar de pensar que estoy dejando de fumar. Nunca debo dejar de pensar que fumé durante unos 13 años y que más de la mitad de ellos estaba deseando dejar de fumar, pero que no podía. Que la próxima vez que quisiera dejar de fumar iba a ser más difícil porque ya conozco todas las triquiñuelas del libro y los inconvenientes de los parches. Desconozco si una segunda vez con el bupropión sería igual de efectiva que esta vez. Con los métodos anteriores la segunda intentona resultó en fracaso más estrepitoso que la primera.
Así pues, la conclusión para hoy es que:
"La manera de dejar de "dejar de fumar" es fracasando y volviendo a fumar. Por lo tanto, como el camino escogido no tiene otra meta que el final del mismo (esto es, la muerte), dejar de fumar es una lucha sin fin contra la adicción en la que el objetivo no es la victoria final sobre el tabaco(pues no existe de forma objetiva) sino conseguir los mayores tiempos de tregua posibles (calidad de vida sin interferencias ni recuerdos de la adicción). Estos tiempos de tregua pueden extenderse durante largos períodos de tiempo (lo deseado) pero la tregua siempre se podrá romper sin previo aviso por los deseos de fumar, los cantos de sirena de la recaida (que nunca podremos controlar)"
ACTUALIZACIÓN (17/06/2008): El segundo vídeo ya está en una entrada anterior. Con tanta entrada y tanto video visto uno ya se pierde. Disculpen las molestias.
Llevo 24 días completos sin fumar. Ya sé. Ya sé que tiene que ser una agonía leer lo que estoy pasando. Ya sé que realmente es difícil encontrar el apoyo que crees necesitar de los amigos más cercanos. Pero siempre hay gente que te da una palabra de aliento sincera. A ellos es a los que quiero agradecer dichas palabras.
También les quiero hacer saber que me he dado un caprichito como regalo por dejar de fumar.
Es éste:
Un (aquí venía la marca comercial y el modelo, pero para qué voy a hacer publicidad gratuita).
Puntos Fuertes: 13'' Panorámicas. Algo menos de 2 kilos de peso. (Portabilidad muy alta)
Puntos Débiles: ¿Blue-Ray, eso qué es? Y una tarjeta gráfica que no es una maravilla (pero que para lo que yo utilizo es más de sobra).
Dentro de un año espero haberlo amortizado si "me mantengo limpio". También espero que en ese tiempo la temática del blog haya derivado hacia otros temas a parte del quitarse de fumar.
Vuelvo a confirmar que el mono físico ha desaparecido. No hay nada relacionado con la abstinencia a la nicotina. De hecho, no puedo recordar síntomas físicos de la abstinencia que haya tenido en esta ocasión.
Pero tengo un amigo nuevo que es mi mono psicológico. Y es que 13 años son muchos años en cuanto a conductas y el cigarrillo lo tengo como respuesta programa a multitud de situaciones mentales: aburrimiento, estrés, felicidad, placer, tristeza, depresión leve, ... en definitiva a todas. Porque en 13 años pasas por todos los posibles estados y estás fumando sin parar. Por lo tanto todos han estado asociados con la nicotina de forma obligatoria.
Ayer escribí la entrada "Razones tengo pero no me acuerdo" intentando explicar la causa por la que he recaído muchas veces antes y casi lo hago esta vez. Cuando las ganas de fumar se vuelven muy intensas, las razones por las que estás dejando de fumar simplemente ya no existen, ni recuerdas que tenías razones para dejar de fumar.
Pues bien, horas después de escribir la entrada y coincidiendo con el pico de stress laboral más alto que tengo en todo el año, hubo un momento en el que me derroté a mi mismo. Sabía que necesitaba una calada, estaba completamente convencido que una calada me iba a ayudar. Me convencí de ir a un bar a tomarme un café y comprarme un paquete de tabaco para superar dicha tensión.
Cuando llegué, me pedí el café y localicé la máquina de tabaco. Sabía que tenía cambio suficiente como para comprarme en la máquina el paquete de tabaco y el mechero. Ahí estaba, tenía el "plan planea'o" pero no lo hice.
Saqué el móvil donde tengo instalado también un quitómetro "portátil" en el que hay notas sobre lo malo que es fumar y los beneficios de dejarlo y aunque están en inglés más que menos las entiendo. Así que taza de café en una mano y móvil en otra pasé cuatro o cinco minutos.
En ese tiempo me di cuenta de que el tabaco no me iba a ayudar con la tarea que tenía que hacer, que encima, después de 3 semanas sin fumar, me iba a coger un mareo y un mal cuerpo de narices que me iba a impedir hacer lo que pretendía hacer. Me di cuenta de que realmente solo quería una calada, no un cigarrillo entero, y que comprar 20 juntos era demasiado como para luego tirar los 19 restantes sin remordimientos y sin fumármelos.
Para colmo, después de este episodio de crisis, pregunté a mis más allegados cuándo creían que cesarían los deseos de fumar y, aunque no han sido fumadores y no creo que sepan mucho de esto, me contestaron que ¡nunca!...
Pues eso, que ayer no pude evitar la tentación de comprarme una caja de regalices para tener esa sensación de sabor fuerte en la boca, que estaba empezando a echar de menos y con la que me entraba una auténtica morriña de tabaco. Así que de vez en cuando me meto un regaliz y aspiro aire por la boca. Una sensación sucedánea a la de fumar. Las "gulas" del exfumador. Aún y todo prefiero hacer el tonto aspirando aromas de regaliz que hacer el suicida volviendo a fumar.
Todo lo necesario para llegar al día 22 de junio y hacer un mes de abstinencia total y absoluta.
Por lo demás, el quitómetro sigue su cuenta: "No fumo desde hace 2 semanas, 6 días y 1 hora. En este tiempo he dejado de fumar 521,09 cigarrillos y me he ahorrado 65,14 Euros".
Llevo ya más de una semana en la que me doy cuenta de que no echo en falta al tabaco tanto como pensaba que lo echaría en falta antes de empezar a dejarlo. He de reconocer, sin embargo, que me entran ataques de 5 minutos en los que si tuviera un cigarrillo y un mechero al alcance de mi mano me lo fumaría. Sin más, sin dilemas, sin remordimientos. Son momentos en los que las razones por las que dejo de fumar parecen haber sido borradas, no estar por ninguna parte. Parece como si no hubiera tenido nunca razones para dejar de fumar. No sirven para nada. Incluso tengo una lista con las mismas, y no la miro desde que la metí en la cartera.
El consejo de llevar la lista con razones por las que dejas de fumar, será bueno como refuerzo en tiempos normales, pero es muy malo como tabla de salvación en tiempos tormentosos.
Viendo los logros que están por venir según el Quitómetro, me doy cuenta de que al final estaba fumando más de un cigarrillo por hora. Esta media teniendo en cuenta las 24 horas del día... ¡Una barbaridad! Y me he dado cuenta que tal vez tenía mi dependencia descontrolada, como una diligencia con los caballos que tiran de ella en estampida. A toda velocidad hacia delante sin ningún control. Tal vez el inconsciente dijo esta vez: "Soooooo, para!"
Ya os contaré cómo ha acabado lo de los regalices...
P.S. Una última cosa, por si a alguien le puede ser de utilidad. No sé si os habréis fijado, pero respecto a los fumadores de muchos cigarrillos al día con los que os cruzáis ¿no os habéis fijado a veces como que son más parcos en palabras, les cuesta más mostrar emociones, o parecen más lentos pensando que los no fumadores, o tienen un tono de voz característico? Lo digo porque estoy notando estos días que mi estado de ánimo es más nervioso que cuando me jincaba un paquete largo de luqui. Aunque yo sé que ese plus de nerviosismo es natural a mi, hay gente que puede decir: para estar siempre tan nervioso vuelvo a fumar... ¡ERROR! No caigas en ese razonamiento, aceptar que sois más nerviosos al natural que con nicotina. No es un síntoma del sindrome de abstinencia, es un síntoma de que sois vosotr@s mism@s.
Estoy dentro de las vigésimas 24 horas de abstinencia. Después de comer, habré dejado de fumarme 500 cigarrillos, medio millar, 2 cartones y medio, 62,50 euros.
Hay momentos que no me doy cuenta que no fumo. En los que no pienso en ello en absoluto. Ni soy consciente que he sido fumador y que ahora estoy sin fumar. Son momentos en los que realmente disfruto de la liberación de la adicción, esos en los que la adicción no existe ni ha existido, porque no la siento. La no consciencia del dolor, nos impide disfrutar del placer.
Hay otros en los que pienso en fumar. Incluso esta noche "le he dado una calada" a un cigarrillo en sueños. Pero no he notado el efecto de haberla dado, ni la tos, ni el mareo que seguramente sufriría. Otras veces, pienso en fumar darle solo una calada en vacaciones, ...
Creo que voy a tener que releerme toda la serie 'exfumador' del blog para ver los sacrificios que he tenido que hacer y el esfuerzo que me ha costado llegar hasta donde estoy (sin olvidar que he querido dejar de fumar desde hace más de 8 años y no lo había conseguido hasta ahora).
Esa es mi propuesta para el día de hoy. "No voy a fumar hasta que no me relea todas las entradas de la serie 'exfumador' de este blog". Luego, si soy lo suficientemente idiota, fumaré otra vez. (¡Espero que no!)
Leo aquí que el Partido Socialista a través de su portavoz dice lo siguiente:
"en España no hay crisis económica por cuanto que el crecimiento de nuestra economía sigue por encima de la media de la zona euro"
Simplemente, esto es igual que decir que la popa del Titanic no se está hundiendo porque está a más altura sobre el nivel del agua que la parte central del barco en la que está entrando ya el agua.
"los problemas económicos son internacionales y surgen por la situación de Estados Unidos y la subida de los combustibles, pero el Gobierno está 'trabajando duro' para afrontarlo y 'hay una buena respuesta a una situación económica difícil'."
1.- Los problemas económicos cada vez son más nacionales, los notamos nosotros. 2.- También surgen por la poca renta disponible existente para algunas familias con hipotecas a tipo de interés variable. 3.- Esperemos que estén trabajando duro, es su deber. 4.- Si existe una buena respuesta a esta situación ¿a qué están esperando para "responder"?.
Buenos días y de la suerte ya hablaremos otro día.
Hoy lo he pasado bastante mal. Me ha entrado en el trabajo un ataque de hambre/mono de nicotina al mediodia que me ha tenido volado hasta la hora de comer. He intentado echarme un poco de siesta antes de volver al trabajo y en el trabajo otra vez me ha dado.
Puta mierda de tabaco. ¡Cómo te intenta atrapar!¡Cómo intenta que vuelva a sus humeantes y cancerígenos brazos! Tengo que resistir.
Estos días atrás todo parecía indicar que el proceso de dejar de fumar iba viento en popa. Estaba muy optimista y las ganas de fumar no existían. Había utilizado únicamente 18 pastillas de bupropión cuando te suelen recetar 130 y me mantenía firme en la idea de no fumar... En el fondo pensaba que estaba siendo demasiado fácil. Y la realidad lo ha confirmado.
La terrible ansiedad que solía tener los primeros días cuando intentaba dejar de fumar en otras ocasiones ya es solo un recuerdo del pasado. La necesidad física de nicotina ha desaparecido. Sin embargo ahora toca "desaprender" toda la rutina relacionada con el tabaco, como fumar cuando escribía en el ordenador, cuando terminaba cualquier comida, cuando salía del cuarto de baño, cuando salía de cualquier sitio donde no se podía fumar, cuando quería "hiperconcentrarme", ... es decir, siempre. Siempre tenía que saciar al monstruito de la nicotina que habitaba dentro de mi, siempre tenía que evitar la abstinencia de nicotina.
La dependencia psicológica ahí está. Aún persiste. Aunque hay ratos en los que no soy consciente de que "estoy dejando de fumar" sino simplemente vivo sin sufrir interferencias de esos 13 años que he estado echando humo cual chimenea.
Como sustitución de la terapia psicológica que debe llevar toda deshabituación tabáquica según los expertos, sigo leyendo todo lo que encuentro en Internet sobre cómo dejar de fumar. En estas lecturas he descubierto un apoyo que no conocía. Consiste en que los días antes de dejarlo vas depositando todas las colillas en una botella de cristal. Cuando dejas de fumar la rellenas hasta la mitad más o menos con agua y la guardas. Cuando te entren las ansias irresistibles de fumar coges esa botella, la abres, y aspiras el aroma. No quiero ni imaginarme la peste que tienen que echar 20 ó 30 colillas a remojo durante varios días, además del color negruzco que cojera el agua. ¡Qué asco solamente de pensarlo!
En el lado positivo, que siempre tiene que pesar más que el negativo, cabe destacar que he empezado a disfrutar de los espacios públicos cerrados. En el caso concreto que nos ocupa: del teatro. Hace un par de días estuve viendo una obra de teatro en la que participaba un amigo y el hecho de no estar calculando cuanto tiempo quedaba para entrar para fumarme el último, ni salir corriendo para fumarme el siguiente después de la obra, me dejo gratamente sorprendido. Gratamente sorprendido de lo natural y lo fácil que fue. En realidad, fumar complica más las situaciones sociales que no hacerlo, y encima es más caro. Yo ya lo estoy empezando a notar en mi bolsillo.
Bueno aquí paro porque podría estar analizándome y dándome razones con las que confirmar que estoy tomando la decisión correcta durante muchos minutos más. Sin embargo, los quiero aprovechar para gastarme el dinero que llevo ahorrado por dejar de fumar.
Aunque creo que voy a vencer, estoy pasando momentos críticos, en los que la motivación va desapareciendo. Sigo con mi lucha contra el tabaco.
"No fumo desde hace 2 semanas, 2 días y 2 horas. En este tiempo he dejado de fumar 419,19 cigarrillos y me he ahorrado 52,40 Euros"
Un apunte rápido para compartir con todos que: "No fumo desde hace 2 semanas, 32 minutos y 21 segundos. En este tiempo he dejado de fumar 364,58 cigarrillos y me he ahorrado 45,57 Euros".
No es mucho dinero ahorrado, pero por la liberación de la adicción, la mierda que he sacado de los pulmones y la energia ganada ya merece la pena el esfuerzo.
Además, según el quitómetro, estadísticamente en las próximas 24 horas ¡VOY A TENER 0 ATAQUES DE GANAS IRRESISTIBLES DE FUMAR!
Siguiendo con la serie de imágenes desagradables, aqui os traigo calentito el resultado de la limpieza bronquial del día 13.
Mañana cumpliré los 14 días, dos semanas completas, a las 10:16. No he estado tanto tiempo sin nicotina en mi cuerpo desde que empecé a fumar los fines de semana hace ya casi 13 años.
También mañana por la mañana harán 48 horas de abstinencia del bupropión, y si que he notado algo más de nerviosismo pero también va mejorando mi capacidad de concentración y lo que está ya a cero es la necesidad física de nicotina. ¡Eso es lo que quería! Por cierto, a quienes les preocupen los efectos secundarios del bupropión, SIEMPRE SEGÚN MI EXPERIENCIA (CADA CUERPO ES UN MUNDO) y (EN ABSOLUTO SE PUEDE GENERALIZAR EN ESTOS ASUNTOS), decirles que los peores episodios de molestias a la hora de dormir que he tenido se han dado hoy, dentro del día 13 de abstinencia, y después de suspender el tratamiento con el bupropión.
Me parece que mañana me voy a dar un capricho totalmente irracional como premio. A ver que se me ocurre. Cada día que pasa estoy más contento por la decisión tomada.
Esta mañana he visto por lo menos a dos fumadores fumandose su pitillito de por la mañana antes de entrar a trabajar. Me he visto reflejado, yo era antes igual o peor. Lo extraño (y positivo) es que no me han dado envidia. Más bien los he visto como chimeneas contaminantes.
Esta mañana mientras me estaba preparando para irme a trabajar, me he dado cuenta en el último momento que se me había olvidado tomar la pastilla de bupropión.
Si mi cuerpo no me reclama la dichosa pastillita, entonces ¿no será que no la necesito? Así que me la he metido en la cartera por si acaso (por si acaso mejor poner una pastilla que un cigarrillo). Nadie quiere morir un miércoles de su juventud de un mega-hipocondriaco-super-fuerte-de-verdad-te-lo-juro-por-la-madre-de-mafalda ataque de ansiedad.
Y si me he notado algo, ha sido tal vez un poco más de nerviosismo. Pero, aunque no lo parezca, yo siempre he sido muy nervioso cuando no estaba bajo los efectos de la nicotina ni del bupropión, así que me considero sanado. Considero que he dejado el tabaco.
Si alguna vez vuelvo a fumar, aunque sea mañana, no lo voy a considerar como una recaída, entendida como que no has conseguido abandonar a la sustancia. Lo voy a considerar como un fallo mío al controlar el stress mediante la nicotina. Porque lo puedo controlar de otro modo, del modo que lo controlan los no fumadores desde siempre, aguantándolo o somatizándolo, pero nunca fumando.
Del hilo del último párrafo quería expresar unas ideas que me han venido hoy a la cabeza: cuando la gente deja de fumar, si lo hace desde un punto de vista de privación (me estoy privando de fumar), psicológicamente está siempre en una posición de añoranza de lo que tenía antes (aunque vea lo positivo de su nueva situación, siempre notará que le falta "una muleta en la que apoyarse" aunque sea malo). El enfoque correcto debería ser el enfoque de ganancia (estoy ganando años de vida, estoy ganando empleabilidad, estoy ganando energía, estoy ganando el sentido del olfato que lo tenía perdido, estoy mejorando el sentido del gusto que lo tenía atrofiado, estoy ganando sueños más reparadores, estoy ahorrando más dinero, estoy recuperando capacidad respiratoria...)
En mi opinión, una vez superado el síndrome de abstinencia físico a los once días, el enfoque positivo es el que puede hacerme olvidar el cigarrillo para siempre. El enfoque de privación es el que te puede hacer permanecer en un foro de exfumadores durante un año lamentandote por lo duro que es el mono.
Un consejo para los fumadores que estén dudando de cuando dejarlo:
Traducción "Duda: en la batalla entre tú (fumador) y el Mundo (cada vez más anti-fumadores), apuesta por el Mundo"
Muerte al Monóxido de Carbono nicotínico!! Larga vida al oxígeno natural!!
Hay veces en las que miro atrás y me recuerdo feliz y humeante como un pan recién hecho (más bien como una carretera recién asfaltada) (humeante no implica feliz y feliz no implica que tenga que ser humeante el recuerdo)
Podía llevarme el placer a la boca y dejar que me inundara sus más relajantes sensaciones, (podía seguir drogándome con nicotina para calmar mi sindrome de abstinencia en cualquier sitio) aspiraba el aroma vegetal de sus soles y dejaba volar la imaginación a lomos de sus volutas, me daba igual su procedencia. Nunca le he aplicado al placer la ley de extranjería. Americano o filipino, turco o cubano en todos encontraba el infinito goce de una buena bocanada de humo. (¿goce en una bocanada de humo asfixiante? algo no me cuadra)
Siempre lo he tenido como un buen amigo, (¿personalizar una amistad en un objeto inanimado que termina quemado y aplastado?) me acompañó en el trabajo y en el amor. En los momento más felices y en los difíciles. (¡qué remedio! llevas arrastrando la adicción años y años...)
Ahora casi no puedo enseñarlo, casi no puede venir conmigo. (No seas tan tremendista, ¡demagogo!) Nos vemos a escondidas como los amores imposibles y desgraciados. Nos vemos en las esquinas y en las puertas del trabajo. (Nos vemos a escondidas como los conspiradores o los delincuentes. Nos vemos donde menos perjudicamos a los otros)
En nombre de la salud nos han desterrado. (Os han desterrado por respeto a los demás).
Dicen que mata, como la vida. (Pero, ¿quién desea una muy probable muerte lenta y dolorosa?)
Y yo no me voy a quedar aquí lamentándome. Lo quiero tanto que voy a quemarlo a bocanadas. El que quiera que me siga. (Sin palabras me quedo, primero incitando a la acción vía "efecto espejo", luego ¿lo quiero tanto que voy a quemarlo? son casi malos tratos al cigarrillo. Por último, "el que quiera que me siga" hay que utilizarlo cuando uno está seguro que no se está tirando por una ventana...)
Este texto puede ser considerado una obra de literatura digna de elogio. Aunque su lectura sea un acto bello, seguirá tratando sobre un veneno (la nicotina) y una adicción (el tabaquismo) que provoca más sufrimiento que felicidad.
"No fumo desde hace 1 semana, 3 días y 21 minutos. En este tiempo he dejado de fumar 260,38 cigarrillos y me he ahorrado 32,55 Euros."
Dentro de la búsqueda internetera diaria que me ayuda a refrescar los motivos por los que dejo de fumar, he encontrado algo que quiero compartir con vosotros:
Como no sé si puedo publicar su contenido, paso a criticarlo directamente.
1º) Se asimila "ser buen fumador" con ser buen ciudadano con "normas" como haz el tabaco agradable para los no fumadores, no tires las colillas encendidas o apaga tu cigarrillo en los lugares donde no se permite fumar. También hay que recriminar a los menores que veas drogarse con nicotina... = Ser buen fumador es ser un boy-scout.
2º) Para ser buen fumador tienes que ser inmune al poder adictivo que tiene la nicotina. Capacidad de la que carecemos gran parte de los seres humanos por no decir todos. Por lo tanto, solo puedes fumar los cigarrillos que te dan "placer" y eliminar los cigarrillos tontos. Debes luchar todos los días con tu adicción para no fumar "en demasía". = Ser buen fumador es una mezcla entre ser masoquista e inmune a la nicotina.
3º) Mienten descaradamente diciendo que el tabaco ayuda a pensar o que de los cigarrillos se puede inhalar la voluntad para dejarlos. ¡Qué pregunten a los que lo hemos intentado dejarlo varias veces y no lo hemos conseguido!. Por inhalar, muchos hemos inhalado tanto humo del tabaco que hubieramos podido inflar un dirigible-zeppelin, pero la voluntad para dejarlo no ha provenido del humo sino de los inconvenientes de fumar. = Ser buen fumador es disfrutar de las "ventajas" de fumar.
1º) Ser un mal fumador es ser incívico, esto es, fumar en lugares donde no está permitido y tirar colillas encendidas en playas y bosques. = Ser un mal fumador es casi ser un delicuente.
2º) Ser mal fumador es sucumbir a la dependencia de la nicotina. Algo de lo que no somos culpables los fumadores "por viciosos" sino por ser seres humanos que se enfrentan a una sustancia adictiva. Por lo tanto, mal fumador es aquel que siente la necesidad de fumar cada poco tiempo, en ayunas, entre platos en una comida o en la cama. = Ser mal fumador es ser humano y engancharte a la nicotina.
3º) Ser mal fumador es atentar directamente contra tu salud, como fumar mientras practicas algún deporte o fumarte más de la mitad del cigarrillo (pues estás "re-fumando" parte de las sustancias dañinas que el tabaco de la segunda mitad del cigarrillo ya filtró). = Ser mal fumador es ser inconsciente.
Concluyendo, cuando era fumador y no estaba muy informado la existencia de una Asociación de Fumadores por la Tolerancia, tener una asociación que defendiera los intereses de los fumadores me parecía muy buena idea. La sociedad estaba-está arrinconando a los fumadores contra las cuerdas. Sin embargo, ahora como recién ex-fumador y leyendo estos decálogos comentados tengo mis dudas de a qué intereses están sirviendo realmente.
PD: Creo que ayer, mis pulmones expulsaron "algo" muy oscuro.
Los deseos de fumar aún no han desaparecido aunque puede que sean más llevaderos estos días.
Ahora estoy más preocupado por convencerme que ya soy un no-fumador y hacer mi vida cotidiana sin acordarme del tabaco. La ansiedad del "¿qué pasará si me entran unas ganas irresistibles de fumar y no tengo tabaco ni lo puedo conseguir?" ha desaparecido por completo.
La clave con el zyntabac me parece a mi que está relacionado con la dopamina que se segrega en el cerebro al fumar. La nicotina es la encargada de que se produzca esa segregación.
Ahora bien, el bupropión recapta la dopamina que segrega la nicotina durante la primera semana que estás fumando. Y lo notas cuando fumas. Fumas, no tienes mono, pero la "recompensa" cerebral por fumar no se produce. Aún así no hay efectos de retirada. Es como si el sistema que alerta de la "bajada de los niveles" de dopamina fuera independiente del sistema que capta la dopamina "extra". De esta manera, el sistema que controla el nivel de dopamina "ve que todo está correcto" (hay mucha dopamina por haber fumado), aunque el sistema que capta la dopamina "extra" deje de recibir esas cantidades extras. Me parece que me he liado, solo quería darle una explicación al funcionamiento de esta pastillita que me está ayudando a salir del pozo del tabaco. ¿Alguno tiene su idea particular de cómo funciona realmente el bupropión?
Un Hummer con un altavoz y un dj que parecía el amigo del portero de la Plaza de Toros. Eso sí, la música era buena. Pero es que a esas horas de la madrugada cualquier música que te despierte un poco más parece buena.
