No tengo... - Tengo la Vida. Nina Simone ya lo dijo una vez

Ain't got no home, ain't got no shoes
Ain't got no money, ain't got no class
Ain't got no skirts, ain't got no sweaters
Ain't got no faith, ain't got no beard
Ain't got no mind

Ain't got no mother, ain't got no culture
Ain't got no friends, ain't got no schooling
Ain't got no name, ain't got no love
Ain't got no ticket, ain't got no token
Ain't got no God

What have I got?
Why am I alive anyway?
Yeah, what have I got?
Nobody can take away

I got my hair, I got my head
I got my brains, I got my ears
I got my eyes, I got my nose
I got my mouth, I got my smile

I got my tongue, I got my chin
I got my neck, I got my boobs
I got my heart, I got my soul
I got my back, I got my sex

I got my arms, I got my hands
I got my fingers, Got my legs
I got my feet, I got my toes
I got my liver, Got my blood

I've got life, I've got my freedom
I've got the life

El origen de la canción tiene que ver con la situación que vivieron los esclavos en Estados Unidos. En la canción se quejan de que no tienen nada. Desde lo material (hogar, zapatos, dinero, ropa), pasando por necesidades básicas no materiales (madre, educación, amigos, amor, religión). ¿Qué es lo que tienen, entonces? Se tienen a ellos mismos (pelo, cabeza, cerebro, oídos, ojos, nariz, boca, sonrisa, lengua, barbilla, cuello, pechos, corazón, alma, espalda, sexo, brazos, manos, dedos, piernas, pies, sangre; la vida y la libertad).

Con el tabaco no tienes libertad.
Estás acortando tu vida.
Tu sangre es más espesa, circula por capilares más estrechos y además no puede circular por los más pequeños porque se colapsan.
Por esto último, tienes los pies más fríos y la circulación de tus piernas es peor.
Lo mismo pasa con tus manos y tus dedos (que además están amarillos).
El sexo se ve perjudicado por la peor circulación sanguínea y la fertilidad se ve mermada.
La nicotina y la adicción cautivan al alma haciéndola dependiente del humo.
El corazón sufre un mayor estrés mecánico.
Los pechos manan leche contaminada.
La lengua detecta peor los sabores.
Los dientes están más amarillos. La sonrisa es menos atractiva.
La nariz detecta menos olores y solo los más fuertes.
Los ojos y los oídos están pendientes de las señales que te permiten o no fumar en los diferentes espacios por los que pasas.
El cerebro sufre transformaciones en número de receptores nicotínicos y de dopamina y serotonina. Además sufre modificaciones en sus procesos químicos normales.
El pelo se vuelve canoso antes en los fumadores.

Es decir, estás perdiendo lo poco de lo que enorgullecían los pobres esclavos. Aunque tengas lo que no tenían ellos, pierdes lo fundamental, lo que no podían quitar ni a los esclavos. Te pierdes a ti mismo. Te estás entregando a cambio de ¿qué? De un veneno. Del tabaco.

Con cada paquete de tabaco que compras, estás comprando a plazos otro yo. Otro yo con nicotina en el cerebro, alquitrán en los pulmones y monóxido de carbono en la sangre.

La buena noticia es que se puede salir. Yo te lo puedo confirmar. Todo mi entorno me clasificaba como "un caso perdido". El tema es que tienes que dar un puñetazo encima de la mesa y declararle la guerra al tabaco. Y en esa guerra cualquier cosa es justicable si dejas de fumar. Sin dilemas éticos. Si sirve para que no fumes en ese día es bueno, y punto. En dos meses sin fumar te darás cuenta que no te has equivocado. Te has ganado a ti mismo. Ahora eres libre.

Ánimo si quieres dejar de fumar. Y si no has fumado nunca eso que llevas ganado, pero no restriegues a los fumadores que tú eres mejor.