Este post está inspirado en esta noticia publicada en elmundo.es

Empezando por lo último, estas personas terminan el reportaje echando la culpa a los bancos que no dan financiación a sus posibles compradores. Bien, para empezar hay que entender que un banco es una empresa y como tal mira por su rentabilidad. Un banco no es parte de un Gobierno Comunista o de un Papá Estado que tiene como misión facilitar créditos a diestro y siniestro para beneficio del prestatario. Los bancos conceden créditos para beneficio del prestamista, o sea, para ellos.
Si la operación no es rentable, no la hacen. Problema de liquidez sí, pero también de riesgo.
Como siempre he defendido desde hace ya muchos meses, los precios de los pisos se han disparado de manera injustificada. Parte de culpa la han tenido los interés bajos porque:

1) Han hecho buscar a los "capitales ahorrados" rentabilidades superiores a la inflación que a plazo fijo eran díficiles de conseguir. Las buscaron en el mercado inmobiliario. Se vendía todo, se vendía sobre planos y se revendían antes de terminar de construir con buenos beneficios. Los especuladores ayudaron a que el proceso fuera más rápido y más apalancado. A cualquier especulador, con los intereses al 3 %, le salían las cuentas para solicitar un préstamo para especular.

2) Los interés bajos también han hecho que las decisiones sobre los precios de los pisos (tanto de venta como de compra) se fijarán en la cuota mensual a pagar. Al final, la pregunta a la que respondía el comprador era: ¿y en cuánto se me queda al mes? La respuesta: 200, 300, 400, 500 ó 600 euros al principio de la burbuja dependiendo de la zona y del salario. La respuesta real, cuando comenzó a subir el euribor, se duplicó. En mi opinión, los seres humanos no aprendemos muy bien de las experiencias ajenas y tendemos a medir nuestras previsiones futuras comparando con nuestras experiencias pasadas. Eso ha provocado que mucha gente no sepa que una hipoteca de 500 euros al mes durante 35 años significa una parte muy importante de su renta disponible futura.

Uno de los errores más preocupantes que se han cometido, no sé quién lo ha cometido o si ese cargo existe, es el hecho de que nadie con poder suficiente haya logrado evitar que se produzca esa desaparición de renta futura disponible de las familias tan masivo y cuyas consecuencias estamos viendo venir.

¿A qué viene si no ahora el llamamiento (casi desesperado a mi entender) para que salgamos a la calle a consumir?

Se tiene que reajustar el precio de las viviendas para empezar.